Cómo fortalecer tu sistema inmunológico fácilmente
La vida que llevamos ahora nos expone a demasiados factores biológicos que pueden poner en peligro nuestra salud. Pero no te asustes, aquí te compartimos unos sencillos hábitos que te pueden ayudar a prevenir.
Revisa lo que comes
Las personas que sufren de desnutrición o que tienen problemas de obesidad tienen un mayor riesgo de contraer infecciones, esto se debe a que la cantidad de energía (calorías) que se ingiere es clave para tener un buena salud.
Cuando tenemos un bajo nivel de energía el cuerpo solo se limita a mantener el corazón latiendo, dejando al sistema inmune sin apoyo. Cuando tenemos un alto nivel de energía se pueden contraer enfermedades como la diabetes , problemas cardiovasculares, etc... las dietas altas en grasa tienden a deprimir el sistema inmune y a incrementar el riesgo de infecciones.
Modifica tu dieta, incluye todos los grupos de alimentos cuidando siempre la cantidad de calorías e higiene para cuidar y fortalecer tu sistema inmune.
Duerme bien
Si no descansas lo suficiente tu sistema inmunológico se deprime, dándole entrada a los resfriados, infecciones respiratorias y a otras molestas enfermedades. Un estudio en la Universidad de Luebeck a cargo del Dr. Born reveló que las personas que duermen bien presentan casi el doble de anticuerpos. Según estos expertos las horas de descanso nocturno estimulan la liberación de varias hormonas relacionadas con el sistema inmunológico, como la prolactina, y también la de otras sustancias relacionadas con el bienestar, como la dopamina, algo que en experimentos de laboratorio ha mejorado la acción del sistema defensivo del cuerpo humano.
Consume antioxidantes y vitaminas
Antioxidantes como la vitamina E y el selenio, así como otras vitaminas y micronutrimentos como la vitamina A, C, D y el zinc, regulan la función de varios tipos de células del sistema inmune.
La vitamina E aumenta la respuesta inmunológica por su acción antioxidante.
El selenio es un mineral esencial para iniciar el proceso de inmunidad y también para regular las excesivas respuestas inmunes, así como la inflamación crónica, debido a que juega un papel importante en la regulación de la migración, proliferación, diferenciación, activación y función optima de las células inmunes.
La vitamina A está involucrada en la regulación del crecimiento y diferenciación de todas las células del cuerpo humano. La vitamina A tiene papeles importantes entre ellos: las funciones inmunes normales.
Se ha demostrado que la vitamina C estimula la producción y función de leucocitos (glóbulos blancos), especialmente neutrófilos, linfocitos, y fagocitos.
La vitamina D posee una variedad de efectos que mejoran la inmunidad innata e inhibe el desarrollo de la auto inmunidad.
Un consumo adecuado de Zinc es necesario para a el desarrollo y la función normal de las células del sistema inmune.
